Es increíble como puede cambiar el mundo de alguien tan solo por una sonrisa, a media mañana, al despertarte, a media tarde o cuando abres los ojos en la cama y ves a otra persona a tu lado con la boca en forma de media luna, y piensas que es para ti..esa sonrisa, esa que te hace feliz. A veces lo pienso y creo que la sonrisa es el símbolo universal de la complicidad. También creo que llega un momento en la vida en el que nos volvemos adictos a la complicidad de otras personas.
Muchas veces nos sorprendemos cuando hacemos sonreír a alguien, también cuando otras personas tienen la capacidad de sonreírnos a nosotros sin haber recibido nada a cambio, y es que si lo pensamos bien la sonrisa vale para cualquier momento. Aunque a veces parece que nos cuesta mover la boca. No soy de ese tipo de personas que van sonriendo a todas partes, aunque mi madre siempre se encarga de decirme que si, pero en cambio considero que cuando sonrío puedo conseguir muchas mas cosas, alegrar a otra persona, sí.. o al menos intentarlo, ganar mas afecto e incluso muchas veces mas confianza.
Digo esto porque a mi me pasa cada día, cuando veo la sonrisa de la gente por la calle o en cualquier parte puedo pensar que son felices o que están al menos teniendo una milésima parte de felicidad al día. Lo mejor de todo es que cuando sonreímos normalmente es por una causa, una causa que es provocada por otras personas que con esos detalles conforman los pequeños placeres de una vida.
/Lut
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